Un reciente informe de la universidad Johns Hopkins ha descubierto que las personas casadas que tienen aventuras extramatrimoniales las consideran muy satisfactorias y apenas tienen remordimientos.
Según el estudio, el 90% de los encuestados afirmó que el engaño no afectó negativamente a su matrimonio, y el 80% dijo que se sentían más felices y satisfechos después de la aventura.
Además, el informe encontró que las personas que tenían relaciones extramatrimoniales eran más propensas a tener una relación feliz y satisfactoria con su cónyuge, en comparación con aquellos que no lo hacían.
Aunque estos hallazgos pueden parecer sorprendentes, los investigadores señalan que la mayoría de las personas que tienen aventuras extramatrimoniales lo hacen por razones emocionales en lugar de físicas.
En general, el informe sugiere que la infidelidad puede ser una forma de mejorar la calidad de vida de las personas en pareja, siempre y cuando se haga de manera responsable y con el consentimiento de ambas partes.