Música para sordos: Este podría ser el invento del Siglo.
La tecnología no da pausas y aprisiona, para bien, a todos. Se hace más sencilla e intenta llegar a la cotidianidad. Ese es el desafío. Abandonar las páginas de las revistas de ciencia y llegar al día a día. Un nuevo desafió podría cambiarlo todo: hacer que los sordos escuchen música. Sería el paraíso (lo […]
9 de julio de 2016
La tecnología no da pausas y aprisiona, para bien, a todos. Se hace más sencilla e intenta llegar a la cotidianidad. Ese es el desafío. Abandonar las páginas de las revistas de ciencia y llegar al día a día. Un nuevo desafió podría cambiarlo todo: hacer que los sordos escuchen música.
Sería el paraíso (lo es para quienes escuchamos música fulltime, las 24 horas del día ). El placer que proporciona la melodía ligada a la armonía de varios sonidos, combinadas con lírica que nos conmueve ha hecho de la música el arte más cotidiano, el que nos acompaña en el metro, en el bus, al salir a correr, mientras trabajamos. Ni la literatura ni la plástica, ni el cine o el teatro han podido llegar a esa intimidad tan normal. Ahora la ciencia avanza a llevar ese disfrute a quienes no pueden oír.