En un estudio reciente, un grupo de investigadores notaron que las habilidades relacionadas con la tecnología, en el ámbito laboral, están más desarrolladas en el sexo femenino que en el masculino.
La investigación hecha en Estados Unidos, Digitalization and the American Workforce, analizó el proceso de adaptación de hombres y mujeres a las nuevas tecnologías en el mercado profesional.
Los expertos comenzaron por estudiar los requerimientos y herramientas de la industria. Se dieron cuenta que el 90% de las ocupaciones en Estados Unidos requieren el uso de tecnologías.
Luego se analizó la capacidad de los involucrados para adaptarse a nuevas tecnologías de trabajo. Un puntaje de 48, por parte de las mujeres, rebasó al de los varones con 45 puntos en la prueba.
Por otro lado, la población masculina continúa ocupando los rango más altos en compañías de este tipo: que involucran tareas de computación e ingeniería. Sin importar sus cualidades, se emplean 30% menos mujeres que hombres en esta rama empresarial.
James Damore, quien fue ingeniero de Google, cree que el prejuicio de que las mujeres no tienen las mismas capacidades que los hombres es dañino para la sociedad y para las empresas, ya que las compañías de tecnología que no tienen diversidad de género tienen menor desempeño.