Nestlé y sus rivales están presionados por un cambio en las preferencias de los consumidores hacia alimentos más sanos y un alejamiento de los productos procesados, como los fideos instantáneos o la pizza congelada.

El fabricante de las barras de chocolate KitKat y las sopas Maggi está respondiendo con productos más saludables y también está moviéndose hacia categorías de mayor crecimiento, como el café, el cuidado de las mascotas, el agua embotellada y la nutrición infantil.

La compañía dijo que quería reducir el azúcar otro 5 por ciento sobre el recorte de más del 34 por ciento logrado desde el 2000, y la sal otro 10 por ciento, sumándose a la reducción de más del 20 por ciento desde 2005.

Nestlé también confirmó un compromiso hecho en 2014 para reducir las grasas saturadas un 10 por ciento en todos los productos relevantes que no cumplan con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud.

“La tendencia hacia alimentos más saludables debe ser observada en todo el mundo”, dijo el presidente ejecutivo, Mark Schneider, a periodistas en una rueda de prensa en Vevey sobre el Lago de Ginebra, donde la compañía tiene su oficina central.

“Estamos poniendo muchos recursos en esto”, dijo Schneider. Nestlé gastó 1.720 millones de francos suizos (1.710 millones de dólares) en investigación y desarrollo el año pasado.

Los alimentos y las bebidas para niños son un área de particular interés, dijo Schneider al presentar una campaña llamada “Nestlé para niños más sanos”, que también incluye programas y servicios online para educar a los padres y cuidadores sobre lo que los menores deberían comer.