El agujero en la capa de ozono que hay sobre la Antártica continúa regenerándose y está provocando cambios en la circulación atmosférica, que es el flujo de aire sobre la superficie de la Tierra que causa vientos.
Utilizando datos de observaciones satelitales y simulaciones climáticas, la investigadora Antara Banerjee y sus colegas de la Universidad de Colorado Boulder modelaron los patrones cambiantes del viento relacionados con la recuperación de la capa.
Según publicaron este miércoles en la revista Nature, su restauración se debe, en gran medida, al Protocolo de Montreal acordado internacionalmente en 1987, que prohibió la producción de sustancias que agotan el ozono.
Antes de 2000, un cinturón de corrientes de aire -llamado “Corriente en chorro de latitud media” en el hemisferio sur- se había desplazado gradualmente hacia el Polo Sur. Otra corriente en chorro tropical llamada celda Hadley, responsable de los vientos alisios, cinturones tropicales, huracanes y desiertos subtropicales, se había ido ensanchando.
Banerjee y su equipo descubrieron que ambas tendencias se detuvieron y comenzaron a revertirse ligeramente en 2000. Este cambio no pudo explicarse por fluctuaciones aleatorias en el clima, por lo que Banerjee asegura que son un efecto directo de la capa de ozono en recuperación.
Corrientes modificadas
Las alteraciones en el camino de una corriente en chorro pueden influir en el clima a través de cambios en la temperatura atmosférica y la lluvia, lo que podría conducir a cambios en la temperatura del océano y la concentración de sal.
Martyn Chipperfield, de la Universidad de Leeds en el Reino Unido, pese a que no participó en el estudio, señaló que con la recuperación de la capa de ozono “hemos dado vuelta la esquina”. Agrega que ya habíamos visto señales de que la capa de ozono se está recuperando y que este estudio representa el siguiente paso, que es ver el efecto de esa recuperación en el clima, consignó Newscientist.
Chipperfield dice que es importante saber qué aspectos del cambio climático han sido causados por las emisiones de dióxido de carbono, que continúan aumentando, frente al agotamiento del ozono, que ahora se está deteniendo y revirtiendo.
A pesar de la prohibición de las sustancias que agotan el ozono, estos productos químicos tienen una vida útil muy larga en la atmósfera, por lo que no se espera una recuperación total del ozono durante varias décadas. “La capa de ozono también se recuperará a diferentes velocidades en diferentes partes de la atmósfera”, dice Banerjee.
Por ejemplo, se espera que la capa de ozono se recupere a los niveles de la década de 1980 alrededor de la década de 2030 en las latitudes medias del hemisferio norte, y cerca de la década de 2050 en las latitudes medias del sur. En tanto, el agujero de ozono antártico probablemente se recuperará un poco más tarde, en el década de 2060.
El cambio climático también tendrá un efecto en la capa de ozono. “Se predice un adelgazamiento de la capa de ozono sobre los trópicos”, dice Chipperfield. “Todavía tenemos que enfrentar el cambio climático”, concluye.