Experto señala que en la región los terremotos ocurren cada cinco años y el último fue el 2014
Como una leve activación de las placas, catalogó el director del Centro de Catástrofes de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Antofagasta, Jorge Van Den Bosch, los sismos percibidos durante la madrugada del domingo. Donde el primer movimiento, tuvo una magnitud 5,4 en escala Richter registrándose a las 02:32 de la madrugada, epicentro […]
24 de septiembre de 2018
Como una leve activación de las placas, catalogó el director del Centro de Catástrofes de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Antofagasta, Jorge Van Den Bosch, los sismos percibidos durante la madrugada del domingo. Donde el primer movimiento, tuvo una magnitud 5,4 en escala Richter registrándose a las 02:32 de la madrugada, epicentro que se localizó 90 km al sureste de Antofagasta.
A este movimiento, le siguió otro a las 02:44 y 03:08 horas, de similares características. En este sentido Van Den Bosch, declaró que «ha empezado una activación, según mi punto de vista. Todos los sismos de tamaño cinco para arriba, en general muestran que ya la placa se está activando, porque son parte de una mecánica mayor, si uno mira bien uno ocurrió en Taltal y otro en Antofagasta, la diferencia son 80 km más o menos, entre un punto y otro», puntualizó.
Para explicar en métodos simples, el profesional señala que en este caso la placa de Nazca actúa tal cual un mantel y cuando es tensionada por ambos lados, las cosas en su superficie se mueven, como fue en estos últimos sismos.
Además, recalcó, que la población debe estar alerta, si los sismos que ocurran de acá en adelante sobrepasan los cinco grados. Por lo tanto, agregó que «yo creo que como ya hay dos sismos de tamaño cinco, lo más probable que vuelvan a ocurrir otros con este tirón que nosotros llamamos, para que la población entienda de manera simple. Si aparecen más de esta intensidad, entonces ya entramos en una etapa de activación alerta», indicó.
Frente a esto, recalcó que parte de la cultura y mecánica de todos los habitantes de esta región debe ser estar preparados para un eventual sismo o terremoto. A lo que Van Den Bosch, explicó «nosotros, dentro de los últimos 35 años entre Arica y Taltal, tenemos un terremoto cada cinco años. El último ocurrió el 2014, ya llevamos cuatro años, entonces me preguntan que hay que prepararse, y yo digo por qué, si es parte de nuestra mecánica, estamos bien adaptados para resistir terremotos», aclaró.
Cabe destacar, que según datos proporcionados por el Gobierno Regional, estos sismos no reportaron daños a personas, alteración de los servicios básicos o infraestructura. Tampoco reunió las condiciones necesarias para generar un tsunami en las costas, por último recordar a la ciudadanía de tener siempre a mano una mochila o bolso con insumos básicos y la planificación familiar, fundamental para actuar en estos casos de emergencia.