Animado era el ambiente en distintos puntos del centro de Antofagasta, algunos como podían incluso trabajando, presenciaban el decisivo encuentro frente a la selección de Francia.
Llegamos hasta el restaurant peruano Machu Pichu, donde cocineros, garzones y el propio administrador, alentaban nerviosos a su selección.
Partido donde el equipo dirigido por Ricardo Gareca, se jugaba la vida ante Francia en el duelo por la segunda fecha, donde los incaicos tenían que conseguir por lo menos un empate.
Después de 36 años fuera de un mundial y siete partidos sin victorias en campeonatos del mundo, la luz de la ilusión en Perú se apagó, uno a cero cayó la selección peruana ante los franceses, ni la camiseta ni el canto de estos hinchas sirvió para el consolar la triste derrota.
La oportunidad más clara de empatar el partido y devolver la ilusión a los peruanos, estuvo en manos del delantero Paolo Guerrero en el minuto 30, quedando mano a mano con el portero francés.
Los millones de peruanos en todo el mundo que presenciaban el encuentro apostaban el triunfo en manos de su máxima estrella, constelación que no brilló.
Fiesta teñida de tristeza para el Perú, siendo el primer equipo sudamericano en dejar el Mundial de Rusia 2018, ahora tendrán que esperar cuatro años para aspirar a clasificar a la próxima copa del mundo.
