Taylor Swift, conocida por ser una de las cantantes más populares en Estados Unidos, ha demostrado tener un impacto significativo incluso en el ámbito político. Según una encuesta realizada por la firma Redfield & Wilton Strategies para la revista Newsweek, se reveló que un 18% de los votantes se declaran "más propensos" o "significativamente más propensos" a votar por un candidato respaldado por Swift.
Por otro lado, un 17% indicó que sería menos probable que votará a un candidato apoyado por la artista, mientras que el 55% restante afirmó que el apoyo de Swift no influiría en su decisión electoral. La encuesta contó con la participación de mil quinientas personas elegibles para votar y se llevó a cabo el 18 de enero, con un margen de error del 2.53%.
James Haggerty, consultor de comunicación, expresó a Newsweek: "Ha influido en la cultura popular, los deportes y la economía de regiones enteras de Estados Unidos. Así que, ¿por qué no en la política y las elecciones?". Por su parte, Brad Adgate, consultor de medios, destacó: "Swift es única en su género. Tiene tanto talento y es tan popular y está tan arraigada en la cultura pop. Nadie se le acerca".
La influencia política indirecta atribuida a Taylor Swift ha generado teorías conspirativas entre republicanos quienes afirman que ella podría estar siendo utilizada como un "activo" del Pentágono para inclinar el voto hacia el presidente Joe Biden.
A pesar de mantenerse reacia a manifestar abiertamente sus posturas políticas durante mucho tiempo, Swift confrontó directamente al expresidente Donald Trump durante las elecciones pasadas e instó públicamente a sus seguidores a ejercer su voto contra él.
El poder e influencia creciente de celebridades como Taylor Swift en asuntos electorales refleja una tendencia marcada por James Haggerty quien señaló: "Los medios de comunicación y las redes sociales son ahora el marco organizativo central de la vida estadounidense".
En este sentido resulta interesante observar cómo figuras públicas han logrado trascender fronteras tradicionales para incidir también en decisiones políticas relevantes.
"En un mundo en el que una estrella de un reality show puede llegar a presidente -y quizá serlo dos veces-, todo esto tiene mucho sentido", dijo, refiriéndose a Donald Trump, que coprodujo y presentó The Apprentice durante casi una década antes de su primera candidatura presidencial, en la que derrotó a la demócrata Hillary Clinton, en 2016.